Redes Libres ¿Una utopía?

El pasado 2.006 fuí a varias lugares del Oriente del país a dictar unas charlas introductorias de Software Libre, el formato era el mismo para todas los sitios, por lo que tenía bastante tiempo para compartir con los otros ponentes que, al igual que yo, eran invitados a esta actividad. En una de esas conversas (típicamente muy largas debido a la trocha o a la impuntualidad de las aerolíneas) yo animadamente narraba lo que hacía para divertirme en Cumaná y los sitios que conocía por esos lares del país. Mi interlocutor observó que tenía una agenda muy activa, además mencionó que el conocía muy poco a pesar de haber vivido en la zona oriental.
Inmediatamente me dio mucha curiosidad y pregunté que hacia el para pasar el tiempo, entretenerse y/o divertirse, a lo que respondio: 'pensar'.
Guaaooo!!!, que profundo! ;). Lástima que la intranquilidad y la necesidad de hacer algo me dejen tan poco tiempo para dedicarme a pensar, porque creo que todos los actos deben iniciarse despúes de una profunda reflexión y nuevamente que lástima que sea tan impulsiva, el pasar del tiempo me ha demostrado que a eso de la pensadera también me dedico de vez en cuando, sobre todo cuando me tropiezo con algunas palabras que siempre han logrado descomponer mi estado de ánimo y que hoy me impulsan a escribir esta nota, una de esas palabras es _regulación_.

De esto se ha hablado muchísimo, varios países se han dedicado a crear marcos jurídicos que sustenten la _regulación_ de internet, la verdad es que muchos de estos gobiernos son poco amigos de todo aquello que no pueden controlar. ¿Cómo se les puede explicar que no es necesario filtrar contenidos?, es decir, que cada quién de forma explícita debe _censurar_ todo aquello que atente contra la moral y las buenas costumbres y esto es sencillamente porque cada quién es dueño de su conciencia y nada ni nadie puede decir a que puede tener acceso y a que no. Sin dudas, difícil de explicar y también de entender, veo con preocupación que algunos de estos intentos de _regulación_ han llegado al extremo de pretender generar responsabilidad (o irresponsabilidad) de los ISPs ante ciertas situaciones y hasta se obliga a los mismos a proporcionar datos de sus clientes y se establecen deberes de información obligatorias y justo allí aparece otra de esas palabras que da vueltas en mi cabeza: _privacidad_.

Hay que acabar con el mito de que en la red nadie sabe quien eres. Todo lo que se hace queda registrado en algún sitio y vaya usted a saber en manos de que autoridad y/o organización rastrean cualquier actividad realizada, sin anestesia te digo que es posible conocer tus descargas, páginas visitadas y hasta tus chats, así que piensalo muy bien cuando decidas tirarte una cana al aire en el ciberespacio, ya que ¡siempre dejarás huellas! y nadie te garantizará el _anonimato_ (otra de esas palabras) en la red, recuerda siempre que a mucha gente se le olvida que el Artículo 12 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos establece que el derecho a la vida privada es un _derecho humano_.

Buscando paz a mi conciencia, respuestas a tantas inquietudes, conseguí en Internet el concepto de Redes Libres. Estas redes son el resultado tecnológico de la necesidad de un modelo de comunicación que no sea sensible a la _censura_, y que pueda mantener el _anonimato_ y la _privacidad_ de cada uno de sus componentes.

Al pensar en Redes Libres muchas/os pensamos en redes inalámbricas alternativas que faciliten el despliegue en zonas rurales o urbanas, que sean administradas desde y para la propia comunidad (autogestionadas), también argumentamos que estas comunidades deben adoptar la cultura heredada del movimiento por el software libre, ya que poder acceder al código fuente de los programas y modificarlos cuanto se necesite y a su vez la prohibición explícita de privatizar el conocimiento es una de las principales puntas de lanza del movimiento de Redes Inalámbricas Libres y Comunitarias. Pero es mucho más amplio el objetivo, además se reivindica el concepto de hardware libre, con la propuesta concreta de diseños de antenas, puntos de acceso, entre otros; logrando de esta manera la descajanegrización de esos componentes.

Todo esto se parece muchísimo a lo que andaba buscando, sin embargo, al llegar a este punto me continúan quedando algunas de esas palabras pendientes: privacidad, independencia de los ISPs, anonimato (aunque esto puedo resolverlo con tor), confiabilidad, entre otras. Fue entonces que conseguí el complemento de lo que acabo de narrarles, ese complemento es uno de mis sueños cristalizados en proyectos tan interesantes que se proponen desde APEIRON, estos proyectos muestran que hay otra forma de hacer las cosas y para mi felicicidad, en esta nueva forma la palabra _regulación_ no tiene cabida.

De estos proyectos el que primero probé fue Marabunta, lo que no es una casualidad, ya que la
mala propaganda no ha logrado persuadirme y le tengo especial cariño a las P2P, pues resulta que marabunta al ser una plataforma P2P de intercambio permite la comunicación de forma _anónima_ y descentralizada, ya que son los propios nodos los que se autoorganizan y aumentan sus conexiones con el resto, garantizando de esta forma la _libertad_ de expresión y la _privacidad_ de los usuarios. Me atrevo a afirmar que marabunta es la mejor herramienta con licencia libre que he conocido en los últimos dos años.

Después está Emjambre, es como una versión mas avanzada de Marabunta, la cual está pensada para redes cableadas, mientras que emjambre se centra en las redes inalámbricas autoorganizadas adhoc, está en plena etapa de desarrollo y sin lugar a dudas es exactamente lo que estaba buscando para el proyecto Redes Inalámbricas Libres y Comunitarias (RILC), proyecto que adelantamos desde el colectivo Redes Libres del Sur (RLDS).

Por otro lado y para ir concluyendo, el auge de las redes inalámbricas libres en varias partes del mundo, aunado al descubrimiento de proyectos como los que les acabo de mencionar auguran nuevos y venideros vientos de _libertad_.